miércoles, 30 de marzo de 2016

1ª FIV - Tratamiento



Para nuestra primera FIV por la Seguridad Social, decidieron tratarnos con un ciclo corto con antagonistas.

Y la pauta de medicación que nos pusieron fue:

20 días de Ovoplex
6 días de descanso
5 días de Gonal 125 Ul
3 días de Gonal 125 Ul + Orgalutran
4 días de Gonal 150 Ul + Orgalutran
Ovitrelle 250
400 de Progesterona desde la punción

Ovoplex es una marca de píldoras anticonceptivas. Sí, una píldora que evita precisamente lo que estamos buscando, quedarnos embarazadas... Suena un poco loco pero usándola pretenden relajar los ovarios y que todos los folículos estén pequeños y del mismo tamaño antes de la estimulación.

El Gonal es es una gonadotropina que contiene FSH recombinante, la hormona folículo estimulante y se utiliza para la estimulación ovárica ya que en técnicas de reproducción asistida con in vitro se pretende obtener el mayor número posible de ovocitos.

El Orgalutran es un antagonista de GnRH (Hormona liberadora de gandotropinas) y se utiliza para prevenir la ovulación prematura en pacientes sometidas a una estimulación ovárica.

Por último el Ovitrelle es nuestro gran aliado, este fármaco de hCG recombinante es el responsable de la maduración final de los folículos ováricos.

Mi respuesta a esta estimulación no fue para nada la esperada. Con mi antimulleriana tenía alto riesgo de hiperestimulación ovárica y no me pusieron una dosis muy alta de hormona estimulante (Gonal) porque no lo veían necesario.

En la primera ecografía de control vieron que mis ovarios no estaban respondiendo como deberían, los folículos apenas habían crecido, excepto uno que parecía querer destacar. 

En las siguientes ecografías parecía que ese folículo seguía haciéndose con toda la FSH que le estaba administrando a mi cuerpo, así que decidieron aumentar la dosis de Gonal y "sacrificar" ese folículo para poder obtener otros 6 que parecía que podían crecer.

Y por fin llegó el día que tenía que administrarme Ovitrelle, en menos de 48 horas tendríamos que ingresar en el hospital para la punción y ese día estaríamos más cerca de nuestros sueños.

domingo, 27 de marzo de 2016

1ª FIV - Primeras consultas


Nos llamaron en diciembre de 2014 para darnos nuestra primera cita en reproducción asistida de la Seguridad Social, la visita sería para enero 2015, tras las fiestas navideñas.

Mientras llegaba el día quería informarme del tratamiento y leía foros y blogs donde se hablara de FIV-ICSI, buscaba en Google términos como "embarazo en la primera FIV", "probabilidades de embarazo en una FIV" y cosas así, a ver si arrojaban luz a todas nuestras dudas. 

Empecé a hacerme ilusiones con nuestro inminente embarazo, porque este proceso iba a ser coser y cantar. Si cientos de miles de mujeres se quedan sin quererlo, ¿cómo no íbamos a quedarnos nosotros que nos iban a poner el embrión ya fecundado? (¿Cuántas hemos pensado así la primera vez? ¿Soy la única?)

En nuestra primera cita en esterilidad me hicieron una eco y nos pidieron nuevamente todas las pruebas que habíamos aportado un año antes: seminograma para M, citología y analítica hormonal para mi, serología para ambos.

Para nuestra sorpresa mis analíticas hormonales estaban alteradas, tenía los valores de TSH (tiroides) muy por encima de los valores normales y más para someterme a una FIV (dedicaré un post a este tema) y la FSH también estaba disparado lo que podía indicar una menopausia precoz o una baja reserva ovárica. Como mi ecografía era buena esperaríamos a los resultados de la hormona antimulleriana, que todavía no estaban y que nos diría lo viejos que estaban mis óvulos.

Una vez solucionado el problema con la TSH volvimos a consulta de esterilidad, ese día fue menos agrio ya que la antimulleriana había dado valores muy altos de una reserva ovárica buena, pero sin embargo en uno de mis ovarios (ahora no recuerdo cual) había un quiste y había que esperar a que desapareciera para empezar el tratamiento... Otra vez a esperar... Afortunadamente este fue el último obstáculo que tuvimos antes de empezar nuestra primera FIV pero yo ya estaba tocada, sin confianza en que los tratamientos de fertilidad nos ayudaran a ser papás y dando por sentado que este tratamiento iba a ser muy muy duro, completamente negativa frente a lo que nos venía por delante.

En el próximo post escribiré sobre nuestra primera FIV-ICSI...

¡Besos!

domingo, 20 de marzo de 2016

¿Por qué escribir un blog?


Yo me he hecho la misma pregunta varias veces, ¿por qué quiero escribir un blog? Y reflexionando creo que he dado con la respuesta y con los dos motivos de peso para escribir un blog de reproducción asistida.

La primera razón es terapéutica. Nos encontramos en las puertas de un nuevo tratamiento, nuestra tercera FIV-ICSI y siento la necesidad de escribir como me siento, como voy viviendo cada etapa de este nuevo tratamiento.

Es cierto que tengo la suerte de poder hablar con M, pero en este barco vamos los dos y hay ocasiones en las que no quieres compartir determinados miedos para no contagiar al otro, también tengo la suerte de contar con dos fantásticas terapeutas (de acupuntura y reiki) con las que hablo sin tapujos y luego están mis chicas de Enfemenino, un grupito de amigas al que ya nos une algo más que las FIV y que están dispuestas a escuchar a cualquier hora.

Además me gustaría creer que este blog podría ayudar a personas que estén en tratamientos de reproducción asistida.

La infertilidad es un mundo, todo el mundo conoce a alguien que conoce a alguien que era infértil hasta que dejó de serlo por un motivo u otro... Desgraciadamente cada vez hay más gente con problemas para concebir de forma natural, los motivos por los que no lo logran son tan distintos unos de otros que hay veces que cuesta mucho encontrar a alguien con quien sentirte identificada y en nuestro caso sentirse arropada por personas que entienden tu problema ayuda mucho, muchísimo.

A mi me ha ayudado, en mis anteriores FIV-ICSI y cuando empecé a adentrarme al mundo de la infertilidad, encontrarme con personas que habían pasado por una situación similar, compañeras de batalla que entienden perfectamente lo que sentimos con cada pinchazo, con cada eco de control, con cada espera y como no, con cada beta.

Espero poder aportar mi granito de arena y espero que escribiendo, el proceso se haga mucho más llevadero y pueda vivirlo con total optimismo.

sábado, 19 de marzo de 2016

Desde el principio


Nuestra historia de infertilidad comienza unos años antes de la búsqueda del bebé, no hizo falta que pasáramos meses y meses de ciclos fallidos para darnos cuenta de que había un problema.

En 2011 a M (marido) le diagnostican una enfermedad y la medicación le deja con sus bichines tocados, con poco recuento, muchas formas anormales y un poco vagos... Resultado, si queremos ser papás tendremos que recurrir a algo que llamaban ICSI... O_o

De momento no entraba en nuestros planes ser papás y seguimos utilizando anticonceptivos por si uno de esos bichines más espabilado lograba colarse.

En 2012, en una revisión ginecológica rutinaria le contamos a mi doctora lo que nos había pasado el año anterior, nos pide los informes y el espermiograma y nos dice que dejemos los anticonceptivos, las probabilidades de un embarazo natural son mínimas y aunque pienso en los 15€ que nos vamos a ahorrar todos los meses me molesta la poca confianza que deposita en esos cientos de bichines sanos.

Ya en 2013 después de más de 12 ciclos sin éxito, de más de 12 reglas que nos rompen la ilusión, cada vez más intensa de ser padres y después de ver amigos que lo consiguen casi sin quererlo decidimos iniciar los trámites para entrar en lista de espera de reproducción asistida por la Seguridad Social, lista que al parecer tiene una espera de dos años... Pero bueno, como no tenemos prisa... O ya si?

En la Seguridad Social nos realizan todas las pruebas necesarias que incluyen una analítica hormonal para mi, un espermiograma para M y para ambos una analítica de serología que permite detectar la presencia de anticuerpos en la sangre y así descartar enfermedades como el VIH, hepatitis... Resultados, los esperados para M y yo sin problemas. Decir que no me hicieron ninguna prueba de mis trompas (histerosalpingogragía) porque íbamos directamente a fecundación in-vitro o FIV. 

Y ya sólo nos quedaba esperar, esperamos hasta diciembre de 2014. Un año después de nuestra solicitud nos llamaron para iniciar la primera FIV-ICSI pero eso ya lo contaré en otro capítulo.